Cuando empece con el huerto bien desde pequeño siempre he querido que lo que sembraba diera la máxima producción. Cambien lo que se pretende es que lo que se produce para nuestro propio consumo sea mejor que lo que compramos por eso siempre se evita echar demasiados aditivos. Pero la tierra es como las personas, si queremos que de producción hay que alimentarlas. el mayor dilema es que tenemos el estiércol, que es lo ecológico frente a la química que es el abono.
Las ventajas del abono son variadas, la principal es que a diferencia del estiércol solo nos proporciona un crecimiento y mayor producción de los vegetales y frutos que tenemos plantados, no produce hierbas y podemos elegir en cada momento cual es la cantidad y calidad del que debemos echar. Aseguran que están bien nutrida la tierra y se aplica con menor trabajo que el estiércol.
El estiércol sin embargo dura mas, tiene una mayor presencia en los cultivos durante mas tiempo pudiendo llegar a dos años sin añadir una nueva capa. un buen estiércol puede conseguir que la tierra este bien mullida y que la plantación agarre mejor. Suele ser mas barato que el abono, pero necesitamos mucha cantidad. Produce hierbas en la gran mayoría de los casos y al ser tan persistente se necesita un regado mas activo que con el abonado.
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